¡Vaya, vaya con Ants From Up There!
Es algo lo cual no escucho con frecuencia. Sin embargo, cuando lo escucho lo disfruto considerablemente. Es ese tipo de música que hace que fluyan mis emociones, que mi mente se llene de recuerdos, mi cabeza de pensamientos, en fin, un mar de emotividad, en el que me gusta dejarme llevar y quedarme por un momento en medio de esa inmensidad.
El intro me atrapó, Haldern me estremeció y Snow Globes me derrumbó, pero me encantó eso que siempre se mantuvo de fondo, como cuando todo va cayendo, pero siempre hay algo que te sostiene. Saboreé todos los instrumentos.
La luz de una vela, la noche y el frío, son la perfecta compañía para escucharlo.
Pero desafortunadamente, por ser un tipo de música que relaciono con perderme en mi recóndito yo, y utilizo para yo misma poner las letras de cada canción, para mí, la voz salió sobrando, era como un obstáculo, y no me interesaba nada de lo que pudiera decir. Aun así, no fue algo que detestara, logré evadirla e ignorarla.
Carolina Rojas
Colaboradora de Musifebicos.
