Lo que vivimos ayer en la democracia más importante del mundo, es un reflejo de lo que está pasando en muchos países, la derecha extrema está tomando poder, encontraron en Trump un líder. Este personaje se cree con poder legal para echar abajo unas elecciones donde el pueblo votó por un presidente, dice que le hicieron trampa, todas sus vías legales fueron rechazadas por los jueces, esto hace que un porcentaje de su base votante (75 millones) se enardecieran con el sistema, sistema que no olvidemos le hizo ganar las elecciones de 2016. Lo del día de ayer va a ser un punto de inflexión en la historia.
Podemos hablar de dos supuestos que podrían pasar en el futuro, el primero es que Trump siga enardeciendo a las masas los siguiente 4 años hasta que vengan las próximas elecciones de USA, donde ya tenga una base electoral totalmente construida, lo de ayer no fue una simple de manifestación, es un precedente, fue una muestra de Trump manipulando a su gente, para un propósito, frenar el nombramiento de Biden en el congreso, lo cual logró retrasar este procedimiento, esto es peligroso ya que si nos vamos al pasado reciente de la humanidad encontramos a alguien haciendo lo mismo, quien no se rindió hasta llegar al poder y también con gente de ultraderecha a su lado, el cual desencadeno una guerra mundial, esta similitud nos debe dejar pensando el rumbo al que vamos y lo que vemos no es un buen sendero. En varios países los grupos de ultraderecha están creciendo, ya se ven en cierta parte de Europa, en particular Alemania, esto recrudecido por la pandemia. El evento de ayer lo van a usar como un estandarte de su lucha y de sus ideales, sólo requieren esa persona que los tome de la mano y los haga crecer de manera exponencial y esa persona era Trump.
El segundo supuesto, es que Trump acepte su derrota (optimista), y sea un duro golpe para los grupos de ultraderecha, esto la verdad, lectores, es muy difícil que pase, algunos de estos grupos se disfrazan de ovejas para seguir reclutando seguidores e imponiendo sus ideas (iglesias), así como hay quienes que ya no usan mascara y dicen abiertamente sus ideas racistas, y de esta forma obtienen muchos seguidores por medio de redes sociales. En las protestas por el asesinato de George Floyd se vieron muchos estos grupos de ultraderecha uniformados y portando armas amenazando con disparar y disparando a quienes se les acercaban. Si Trump se hace a un lado va a ser un duro golpe para estas personas y podría ser que se detengan por cierto tiempo el crecimiento de estos grupos, pero la verdad es que esto aún no ha terminado y esperemos que en un futuro veamos este tipo de presidentes caer.
Héctor Quiroz.